Halloween tuvo su festejo en La Paloma y La Pedrera
Adriana Pugliese // LPH
Cuando éramos chicos Halloween era un festejo lejano. El cine y las series de tv de origen anglosajón nos mostraban las calabazas huecas y caladas, con una vela dentro, las brujas volando con la luna llena de fondo, las historias de casas encantadas y apariciones fantasmales que terminaban visitando y alimentando nuestra imaginación, aunque sin que tuviéramos muy en claro en qué consistía el festejo.
De un tiempo a esta parte, Halloween también tiene su espacio por estas tierras y ayer, tanto La Paloma como La Pedrera sirvieron de escenario para un gran festejo en el que no faltaron brujitas, Dráculas y monstruos en miniatura que recorrieron calles visitando casas y comercios para llenarse los bolsillos de golosinas.
Una fiesta anglosajona que vino para quedarse
Halloween (de la contracción en inglés All Hallows' Eve, 'Víspera de Todos los Santos'), es una conmemoración también conocida como Noche de Brujas o Día de Brujas. Se trata de una fiesta moderna resultado de la cristianización de las fiestas del fin de verano de origen celta.
Sus raíces están vinculadas con la conmemoración celta del Samhain y la festividad cristiana del Día de Todos los Santos, celebrada por los católicos el 1 de noviembre.
Se celebra en la noche del 31 de octubre, sobre todo en países anglosajones como Canadá, Estados Unidos, Irlanda o Reino Unido, y, en menor medida, en otros lugares como España y hace unos años también en Latinoamérica donde se acostumbra a salir por la noche con los niños más pequeños disfrazados a pedir dulces y golosinas. Los mayores suelen acudir a fiestas nocturnas disfrazados para la ocasión.
Aun no hay comentarios, sé el primero en escribir uno!