17 de febrero de 2017

La pesca, otro atractivo de nuestras playas

Rocha, para algunos, es mucho más que sol y playa. Por eso te contamos qué están sacando los pescadores en este momento.

Existen innumerables pesqueros naturales en las costas de Rocha, algunos son referentes de este deporte cuando se realiza con reel o caña con boya, desde la costa o embarcado.

En esta oportunidad, te contamos qué se está pescando ahora en nuestras playas.

Jorge Quintans, un aficionado a la pesca, explicó a La Paloma Hoy que en este momento se está pescando en la zona de la balconada hasta la laguna de Rocha “mucho pejerrey, en el faro sale mucho sargo, y  entrando en lancha o kayak se está dando corvina, pescadilla, mingo y sargo.”

En la zona de La Pedrera, Punta Rubia y San Antonio “se está pescando lenguado, en los pedregales sargos, mochuelos y burriquetas “

Además informó que están en conversaciones para “poner una embarcación para sacar gente a pescar y de paseo”

Carnadas

Para pescar corvina negra se aconseja cangrejo, camarón, mejillón, y almeja.

Para la pesca de burriqueta, sargo, pejerrey, corvina blanca, congrio, se aconseja lombriz de mar, y camarón.

Mientras que para pescar anchoa, brótola, pescadilla, corvina blanca, chucho, cazón, tiburón, mero, bagre, raya, congrio, sable, manta, pejerrey y lenguado se recomienda usar camarón, lisa y lacha.

 


Comentarios »
Williams
Hola el informe de lo qué se pesca acá esta muy bien,pero lamento decir que de pesca nuestras costas están muy pobres. A mi encanta la pesca y la realizó todos los dias tanto de costa cómo embarcado y a veces no se pesca nada,pejerrey es lo qué hay más por ahora y depende del estado del mar y el tiempo, ademas lo estamos pescando con piojos ó moscas cómo le llaman algunos.Muchas gracias y muy buena la pagina...
Fernando Núñez
Que tal que novedades hay de pesca
jorge..hola,quiero ir a un lugar que tenga profundidad y haya pique,,alguno que me oriente,gracia
comentario
Héctor Rodríguez hola, lamentablemente no conozco los pesqueros salvo en cierta forma la balconada
de forma fortuita hace muchos muchos años , como todo pescador creo, si voy cerca del agua alguna caña se cuela, en este caso me estoy refiriendo a una tacuara de seis tramos con lína de lengue, después de hacer b ien todos los deberes, preparar campamento en la playa con cierta protección del viento , disfrutar de baños con mi esposa y mis hijos 3 y 8 años, se me ocurrió armar la cañita, no recuerdo bien si había visto a alguien levantar algún pejerrey el tema es que aprovechando que en la punta derecha de la playa no había gente me metí con el agua a la cintura y para mi asombro en el primer lance uno, dos o tres no voy a mentir, se que fué una fiesta , la remera que tenía puesta para evitar el sol ya me quedaba chica mi esposa y yo esa noche comimos pejerrey fresco , un espectáculo. La historia no termina acá al día siguiente después de hacer lo mejor posibles todos los mandados le sugerí a mi compañera (creo que pedí permiso ja.ja) de irme a intentar suerte mientras ellos descansaban, andaba a pie bajo el sol de las tres de la tarde andaba a cien, cuando llego me encuentro mucho oleaje pero donde había estado se soportaba bien pero los pejerrey habían desaparecido, intentos varios durante un tiempo que generalmente no es prudencial sino que es bastante mal extenso, al ver a un colega pescando y levantando alguna pieza en la mitad de la playa, desde lejos lo observé y vi que nadaba las olas (les pasaba por abajo) , pensé hace eso porque tiene una caña corta y por el mismo motivo esta apoyado en la bajada; eran tiempos que no preguntaba mucho o casi nada, si este pesca con esa caña yo no voy a tener dificultad, saludé y me puse a unos metros de él parado en la orilla y con mi tacuara luchando contra el viento en pocos minutos y casi sin darme cuenta terminé sentado a cinco o seis metros atrás, para lo único que me dio fue para soltar la caña separada de mí, íntimamente pensé por suerte no están los gurises , sacudiendome el orgullo volví al mismo lugar un poco más metido en la bajada, pienso qué duré un poco más en mi postura de pescar pero llegaron dos o tres olas seguida y nuevamente a pasear por la arena. Señores ya no había orgullo para sacudir y pensando en la dificultad que podría traer el hecho de engancharme con algunos anzuelos, prolijamente me acerqué al colega y le dije sabe compañero lo voy a abandonar, pues me di cuenta que esta actividad es para hombre. y con sonrisas mutuas se terminó la jornada de pesca. ayer me reí mucho cuando en una presentación que leí sobre pesqueros en rocha hablaron de los posible sorpresivos baños de asiento que podemos lograr en tan lindo pesquero.un gusto , abrazo fraterno.
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