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Walter
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No se trata de sacar o no más restos fósiles; se trata de garantizar actividades productivas que no destruyan más de lo que benefician. El proyecto Aratirí es un desastre natural y aporta una porción de dinero que no justifica las consecuencias de esa barbaridad: contaminación de campos, desvío del río Yi y contaminación de sus aguas, destrucción de actividad agrícola y pérdida directa de más de 3000 puestos de trabajo con apenas 1000 puestos nuevos que duran 10 años por contrato. Insostenible.