El inversionista es el principal interesado en realizar la obra, dado que facilitaría la llegada al complejo Las Garzas, una millonaria inversión inmobiliaria de su propiedad que consiste en edificar cerca de 500 casas y se ubica en Rocha, a poca distancia de la laguna. Hoy en día, ese cruce se puede realizar en automóvil, pero se efectúa sobre balsas y resulta por demás lento.
El puente, que fue autorizado con un diseño del prestigioso arquitecto uruguayo Rafael Viñoly, será financiado a medias entre Costantini y el Estado uruguayo, pero por su compleja concepción, tendrá un costo mucho mayor a lo que valdría un puente lineal, común y corriente.
En ese marco, el inversor, que cuenta con importantes proyectos en Argentina y EE.UU., presentó semanas atrás un pedido al Ministerio de Economía para que exonere de IVA a todo el proceso de construcción del puente. Además, solicitó que Las Garzas también reciba cierto beneficio fiscal para equilibrar los gastos que le insumirá la obra.
Costantini dijo a El País que quitando el IVA, la construcción sería US$ 2 millones más barata, y se ubicaría en US$ 10 millones. Inicialmente, se había estimado que el puente común costaría entre US$ 2 millones y US$ 2,5 millones, y en ese entonces el empresario argentino estaba dispuesto a pagarlo en su totalidad.
Sin embargo, el puente de Viñoly, que presenta como gran novedad su forma circular y busca el menor impacto ambiental posible, hizo que los precios se elevaran considerablemente y que se haya acordado que los costos serían compartidos entre el privado y el Estado.
"Estamos dependiendo de algunas resoluciones por parte del gobierno, estamos esperando algunas respuestas. Nosotros pedimos que se descontara el IVA, porque sobre este puente ese impuesto llega a unos US$ 2 millones, y hay que tener en cuenta que es una obra pública", afirmó el empresario argentino.
"Descontar esos impuestos facilitaría la construcción del puente, y acá hay que hacer un esfuerzo conjunto, porque el puente efectivamente va a salir, al menos, como tres veces más que el originalmente pensado, y porque además también hubo un proceso de inflación de costos expresados en dólares", dijo Costantini.
La empresa del inversor argentino ya realizó la licitación para la construcción del puente y recibió cuatro ofertas de firmas uruguayas, pero recién darán a conocer el nombre de la ganadora cuando el MEF dé una respuesta.
El empresario se hará cargo concretamente de la parte estructural del puente, cubriendo un 50% de los gastos, y el resto será responsabilidad del Estado, que deberá hacer la terminación de la obra, la pavimentación, los laterales y la cometida desde la ruta.
Por otra parte, Costantini explicó que también solicitó al MEF que haya un descuento impositivo para su complejo Las Garzas. "Eso nos compensa, por lo menos en parte, el aumento presupuestario del puente", afirmó el argentino, que también dijo estar al tanto de la renuncia del ministro Fernando Lorenzo, aunque admitió no seguir los pormenores de la política local.
El pedido presentado solicita la exención para Las Garzas hasta un determinado valor, que sea correspondiente al aumento de los costos del puente, explicó Costantini y añadió: "es una forma de financiar un puente que sale varias veces más caro que el puente original".
En ese marco, el inversor dijo que si el MEF no accede a exonerar el IVA y el puente se mantiene con un costo de US$ 12 millones, "no hay forma de que nosotros lo podamos financiar, Las Garzas no tiene esos recursos, de ninguna manera", dijo. También opinó que el precio actual "se fue por las nubes", en comparación con el inicial que rondaba los US$ 2 millones.
"Puedo hacer un mayor esfuerzo, pero no puedo hacer magia. Puedo pagar si el precio es US$ 10 millones, teniendo en cuenta el descuento del IVA y la exención impositiva, si no, no lo vamos a poder financiar, a no ser que aparezca otro tipo de aporte privado. Este trámite ante el MEF para nosotros es vital", resumió Costantini.
El empresario, que ya está instalado en Punta del Este para pasar las vacaciones, dijo que los costos uruguayos son "exageradamente elevados", y puso como ejemplo que "actualmente los valores de construcción llegan a más del doble que en Argentina". "En general, expresado en dólares, todo es caro en Uruguay, el combustible es otro ejemplo", señaló. Costantini dijo que si reciben el visto bueno del MEF a la exoneración de impuestos, estarían en condiciones de iniciar "inmediatamente" las obras. Afirmó que si la respuesta positiva del gobierno uruguayo llega en el mes de enero, el puente se podría iniciar en marzo.

Fuente: El País