22 de junio de 2017
El invierno comenzó con fiesta y fuego
Este miércoles 21 de junio el comienzo de la temporada más fría del año dio paso a la tradicional fogata que tuvo lugar, por primera vez, en el Centro Cultural La Paloma.
Adriana Pugliese // La Paloma Hoy
Pese a que la de este miércoles no fue una de las noches más frías del año, cada madera que esperaba apilada en forma de pirámide a metros del Centro Cultrual La Paloma ardió para vivir la fiesta del solsticio de invierno.
La gente fue llegando poco a poco a arrimarse al Centro Cultural que sirvió de marco para la celebración de la noche más larga del año, el paso del otoño al invierno. Ceclia Olivet, una de las organizadoras, contó a nuestro portal que la fiesta se vivió de una manera muy especial, rodeados de vecinos y amigos que fueron convocados a pasar un momento juntos, en comunidad, con la celebración como excusa: "estuvo buenísimo, muchos jóvenes, niños, familias, gente grande... gran alegría".
Una noche especial
Esta es la primera vez que la celebración del Año Nuevo del Sur se hace en el Centro Cultural de La Paloma.
Olivet contó que "hubo pasaje de videos ilustrativos de cómo lo hacen diferentes comunidades de nuestra Abyayala (NdelaR: nombre con que se conocía, antes de la conquista española, al continente que hoy se denomina América, que literalmente significaría tierra en florecimiento). Estuvieron presentes el We Tripantu mapuche, el Willka Kuti aymara y el Inti Raimi, cerrando con el mensaje de nuestro querido vecino y poeta Enrique Cabrera, recordando los festejos realizados en el 2002."
La música en vivo a cargo de la banda local Sale con Fritas, fue el preámbulo para el inicio al ritual de la fogata: "Muchas personas escribieron en cédulas el deseo a dejar atrás y se lo entregaron al fuego para eliminarlos, así como también los planes para el naciente año, con la intensión de que el humo del fuego lo acercara al Universo", contó Olivet.
Desde la organización destacaron la importante concurrencia con vecinos de todas las edades: "nos sorprendió la enormidad de jóvenes que estuvieron presentes de principio a fin, compartiendo un clima festivo y de gran fraternidad", subrayó Cecilia.
Sin dudas esta fiesta llegó para quedarse y marcar un día en el calendario del invierno palomense que agrega esta tradición mundial a sus rituales: "por lo pronto, tenemos en custodia las brasitas de este abuelo fuego a ser entregadas al fueguito del próximo año", cerró a modo de promesa Cecilia Olivet.
Imagen de portada Mariela Méndez Cosse
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Comentarios
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ernesto y berta
Comentario
Bravo Cecilia e Irene en lograr reunir a la gente linda de nuestra querida Paloma a participar de las magia de las tradiciones de nuestra Tierra. Fue una fiesta entrañable, gran paso que se repita cada año !